domingo, 14 de marzo de 2010

No more tears to cry.

En cuestiones de corazón, nunca he sido muy buena. Nunca he sabido dar en la justa medida, hubo veces en que jugué todas las cartas sobre la mesa, que entregué todo lo que tenía, e incluso lo que no... Hubo otras en las que simplemente cerré mi corazón, no supe ver que alguien sí me quería de verdad, y luego lo dejé ir. Cuando se trató de amor siempre terminé llorando, porque no supe valorar lo que tenía, porque no supe valorarme, porque dí de más, porque di de menos, por una cosa u otra...Nunca pude encontrar un equilibrio. Y en cierto modo me cansé de buscar el amor verdadero, me cansé de hacer una listas de los pros y los contras de cada hombre que pasó por mi vida, me cansé de arruinar todas mis relaciones, me cansé de sufrir y llorar y sentirme culpable...Pero hoy fue tan raro, hoy no pude llorar, hoy me saturé, y tuve ganas de gritar, de arrancarme los pelos, de salir corriendo, de encerrarme y no salir mas, tuve ganas de todo, pero no pude llorar. Hoy lo mal que me sentía no pudo salir, lo tengo estancado, y me di cuenta lo necesario que era que el llorar sea parte del duelo, de una separación. Necesito llorar, necesito ir sacando de a poquito de mi cuerpo todo lo bien que una vez me hizo V. Necesito comenzar a ser conciente de que nunca mas me va a perdonar.
Espero poder ganarle a la incertidumbre.

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